A pesar de la creencia de que cada uno tenemos un tiempo asignado en esta obra, es increíble la facilidad con la que disponemos de este tiempo para perderlo de la forma mas miserable, y cuando menos viene a cuento perderlo oiga, pero es lo que aveces toca.
Tal vez no sea una persona ordenada, supongo que no se aprovechar el tiempo, por eso a lo largo de los años siempre he funcionado mejor cuando alguien me ha marcado los tiempos, plaza en estos momentos vacante, así que los días que me encierro terminan siendo los días mas perdidos a lo largo de la semana academicamente hablando por supuesto.
El tiempo aveces parece encogerse, otras alargarse, como si de una masa elástica se tratara, pero siempre es el mismo aunque nos pueda parecer lo contrario. Tal vez llegue alguna vez el día en que te lamentes de no haber aprovechado mejor tu tiempo, pero al menos siempre nos queda pensar que no hemos vivido esclavos del.
Tiempo de cambiar, tiempo de empezar...
